Subiendo a su percha en el cielo de la mañana, el sol africano atraviesa una cadena montañosa para acariciar un peñasco ancho y plano, abrasándolo con un suave calor. Desde la sombra de una estrecha grieta, emerge una familia de hienas, cuyo polvo caliente empaña el brillo de su pelaje dorado. Se instalan en la cálida extensión de roca para tomar su baño de sol ritual, pero permanecen siempre vigilantes. La sombra de un águila que se eleva se precipita sobre el suelo. Con un chillido urgente, suena la alarma y la colonia se apresura a ponerse a cubierto. A medida que el calor del sol sofocante se intensifica, los aromas ancestrales se desprenden de las rocas chamuscadas, de la escasa vegetación y del hyraceum petrificado. De forma inquietante, se entremezclan para formar un aroma que es a la vez primitivo y exótico, con sus tendencias animales domesticadas por un trasfondo de dulces flores.
En el corazón de Zoologist Hyrax se encuentra un ingrediente atrevido y poco utilizado en el arte de la perfumería: la piedra africana, o hyraceum, que da a este atrevido aroma animal su firma distintiva. Este perfume único mezcla hábilmente azafrán, pimienta rosa, whisky, rosa y almizcles para invocar una imagen abstracta de un polvoriento paisaje montañoso africano. Al igual que los ágiles hírax que salen de las grietas de las laderas en busca del sol sobre sus almizcladas pieles, esta fragancia se abrirá paso en sus sentidos con un toque ligero pero primario.
Perfumista: Sven Pritzkoleit
Concentración del perfume: 20%.
Notas de salida: Elemi, pimienta rosa, azafrán, rosa turca
Notas de corazón: Piedra Africana**, Jacinto, Styrax, Whisky
Notas de fondo: Ámbar, Benjuí, Castóreo*, Civeta*, Pachulí, Sándalo, Tonka
*Notas sintéticas. Zoologist Hyrax no utiliza almizcles de origen animal. **La piedra africana es un subproducto de los hírajes y no se daña a ningún animal en su recolección. Zoologist Hyrax no es un perfume vegano.